domingo, 8 de agosto de 2010

Una carretera hacia el mar

Caen estrellas que se pueden tocar
en el fondo del agujero
que ahora es mi realidad.
Se cierne una luz irradiente
alrededor de los muros
en que habitan mis soledades.
Ahondo buscando señales
que me lleven de regreso
al abismo que no quiero abandonar.

Pensé ver anoche un ángel,
que sólo era una mera estrella fugaz
escapada de su triste malestar.
Se renueva una luna
oculta en un manto de niebla
a través del que no se discierne.

Y mientras tanto,
una mentalidad atraviesa mis ideas.
'Dudaré de entre los barcos que naufragaron
el que será mi hogar'