Ya sabes que no puedo permanecer tan real,
que mis deseos son de más largo recorrido
y mis manos siguen atrapadas en la sed.
Cautividad me transmites con esas miradas
hambrientas tus manos muestran la efimiridad
en la cuenta atrás.
Tan sólo sangre tiñe el día
que la vida regalada para ser mayor
y que la ventana hace envejecer
casi sin quererlo.
Palabras que no llegarán a ver la claridad...
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